Paseo en slow boat hacia Luang Prabang en Laos

Paramos en un par de lados tambien a cargar más gente, encomiendas, y al último hasta un par de docenas de pollos vivos que “amablemente” pusieron al rayo del sol en el techo de chapa del barco jeje. En una de las paradas nos quedamos atascados cerquita de la costa, así que muchos nos hicimos los Rambos y nos bajamos a empujar. Fue muy cómico como todos empezamos a empujar desde tierra firme, y a medida que empujabamos el barquito hacia el río, nos empezamos a dar cuenta que el barco se alejaba y el agua ya nos llegaba caso hasta el pecho jejjeje. En ese momento todos manoteando los barrotes de la ventana, o alguna mano generosa que nos ayude a incorporarnos de nuevo al viaje, fue divertido! jeje.

Alrededor de las 6 de la tarde llegamos Pak Beng, donde hicimos escala esa noche para seguir al día siguiente. Apenas nos bajamos del barco, decenas de personas con carteles ofreciendo los distintos lugares para quedarse. No era muy difícil darse cuenta que el pueblito ese de lo unico que vive, es de los turistas que pasan la noche allí. En el slow boat habia conocido un grupito de viajeros, Marco (Switzerland), Osa (Sweeden), Mariele (Holland), y los hermanos de Polonia, Marta e Ian, así que nos quedamos todos juntos en el mismo hostel. Me pegué un baño y sali más que a caminar, a mirar el pueblo, porque son literalmente 2 cuadras jejej. Pero a todos nos gusto mucho el lugar, muy relajado, con sus puestitos de comida en la calle, dos restaurants para ir a comer algo y un par de hostels, era mas o menos todo lo que habia.

Poco mas tarde nos encontramos afuera del hostel y fuimos a unos de los restaurants a comer algo. A la entrada habia un cartel grande que decia, “My wife is a good cooking” y tambien el dueño del lugar, el cual se encargo de repetirnos lo mismo “Come here, my wife is waiting to cook for you” jejeje. El restaurant la verdad me sorprendió, nos sentamos bien al fondo, donde teníamos una vista al rio y a las montañas increible, y la paz que había en ese lugar era indescriptible.

Pedimos algo, y mientras pedíamos, el dueño, mozo, encargado, o lo que sea, un persona del lugar, un Lao (no se como le dicen jeje) se puso a hablar con nosotros. Como siempre, más o menos lo mismo, de donde sos, de donde venis, para donde vas, pero ahora lo distinto… el flaquito cuando le digo que soy de Argentina, me dice “Hola Como andas?” y un par de cosa mas, y hasta cuando le dije “y vos?” me respondio “Bien” paaaaaaahhh no se el loco jejej. Sigue hablando con los polacos, y de nuevo, les habla un par de cosas en polaco. También hablo después algo de Holandes y otro poco en Suizo?? jajaja, nos dejo con la boca abierta a todos. Despues descubrimos que en los menues del restaurant tenia algunas frases típicas en distintos idiomas, igualmente no le quito nada de merito, un capo el flaco.

Al otro día de nuevo al agua, salimos en el barquito como a las 10 de la mañana. Esta vez era como que ya nos conocíamos un poco mas, o por lo menos de vista  un poco mas jeje, y no faltaba el que empezaba la conversación diciendo “Vos estabas ayer aca en el barco?” jejeje. Y obvio que estaba ayer, no, si me vine en helicóptero hasta acá ejejej. Pero bueh, a veces las preguntas estupidas son las mejores para empezar una conversación jejeje. Asi seguimos viajando en el río Mekong, entre montanas y pequeñas villas con un par de chozas bien camufladas entre las montañas. Como a las 5 de la tarde, sanos y salvos, incluidos los pollos en el techo, que eran más un caldo de pollo que otra cosa jeje, llegamos a Luang PraBang.

(obvio que esta foto no es de Luang Prabang jjeje, pero me quedo al ultimo, es de cuando cargamos los pollos para irnos al río jeje)

.